Otro verano, otro incendio en el campo de tiro de Cerro Muriano, ¿se puede evitar?

En julio de 2007, la ciudad de Córdoba se despertó entre cenizas. El viento había girado del Norte y depositaba en la ciudad el humo de un intenso incendio que amenazaba con quemar todo el campo de tiro de la base militar de Cerro Muriano. Ese incendio fue el más grave que se recuerda en la base militar, que casi desde entonces y año tras año sufre fuegos de este tipo. Aunque ninguno tan voraz.

Desde el jueves por la tarde, la Unidad Militar de Emergencias (UME) trabaja en silencio dentro del campo de tiro de Cerro Muriano para intentar apagar un fuego que amenaza con salir de la zona protegida por el Ejército. De hecho, Ecologistas en Acción informó este sábado que gracias al trabajo del Infoca se ha evitado que el fuego saliese del perímetro militar.

Así, señalan que en la noche del viernes, con la tormenta, el frente de fuego “superó en dos ocasiones las infraestructuras de defensa”, pero que las llamas pudieron ser rápidamente neutralizadas por los agentes del Infoca.

El campo de maniobras de Cerro Muriano se formó por la agregación de varias fincas, en total 11 fincas, de las que destacan el Ronquillo Alto, con casi 1.500 hectáreas de superficie. La superficie del campo de maniobras supera las 4.500 hectáreas. Son fincas que originariamente se dedicaron a la ganadería y al cultivo marginal, además de la caza. Actualmente por su condición de zona militar el uso es exclusivo para fines militares.

El interior del campo de tiro está lleno de proyectiles. Es imposible entrar en determinadas zonas cuando hay fuego, por el riesgo que supone que algunos de esos proyectiles que han caído en el suelo y no han estallado puedan hacerlo. De hecho, en ocasiones alguno estalla y propaga un poco más el incendio. Por eso, el fuego en el campo de tiro avanza casi sin control. Los aviones del Infoca no pueden sobrevolar tampoco el campo de tiro, más allá de refrescar un perímetro formado por un amplio cortafuegos.

Pero, ¿qué se puede hacer para evitar que año tras año arda el campo de tiro? Fuentes militares consultadas por este periódico insisten en que las prácticas de tiro se suspenden en verano, durante el periodo en el que la Junta prohibe hacer fuego en la Sierra de Córdoba. De hecho, reiteran que el fuego no es provocado por prácticas de tiro, aunque tampoco aclaran la causa exacta. Las del incendio devastador de 2007 no pudieron averiguarse.

Los que sí creen que se pueden tomar medidas para evitar incendios en la base militar son los miembros de Ecologistas en Acción. Este sábado, reclamaron que la principal pasa porque el Ejército no use fuego real en sus prácticas en el campo de tiro. También reclaman un plan integral de retirada y limpieza de proyectiles en la zona. De hecho, aseguran que en ese plan se deberían incluir los terrenos forestales linderos, donde alguna vez ha podido caer algún proyectil perdido. Por último, reclaman una recuperación medioambiental de la zona afectada.

“La adopción de las medidas anteriormente señaladas, facilitaría la incorporación en un futuro próximo, de las más de 4.000 hectáreas del campo de maniobras de Cerro Muriano, a la red Natura 2000, dando así continuidad por Sierra Morena central, a la red más importante de espacios naturales protegidos de carácter europeo”, concluyen los ecologistas, que advierten que la Junta es consciente del riesgo potencial para toda la sierra que supone el campo de tiro de la base militar.