Un juez condena a una promotora por entregar seis años tarde las viviendas

El titular del Juzgado de Primera Instancia número diez de Córdoba ha condenado a Promociones Ruiz, una empresa cordobesa, a indemnizar a tres parejas por entregar seis años tarde las viviendas que estos habían adquirido. La sentencia, que todavía no es firme, condena a indemnizar a estas tres parejas con 38.300, 19.800 y 15.500 euros a cada una de ellas, según consta en el fallo.

Los compradores plantearon el litigio después de que se tuvieran que ir de alquiler hasta la entrega de los pisos, que se demoró desde el 31 de diciembre de 2001 hasta Junio de 2007. La indemnización fijada es al pago del coste del alquiler de las viviendas que tuvieron que afrontar estas tres parejas. Una de ellas, incluso, llegó a anular la fecha de la boda que tenían previsto celebrar.

Según consta en la sentencia, la promotora alegó que no se fijó con claridad una fecha de entrega de la vivienda en el documento de reserva de la vivienda y que existieron problemas en el proceso de edificación. No obstante, el juez considera válidas las declaraciones testificales de otros compradores de esta promoción a los que llama “compañeros de fatiga” que declararon que se fijó el 31 de diciembre de 2001, que esa “oscuridad” en el contrato no puede perjudicar a los compradores al tener la condición de consumidores y que la promotora es una profesional del sector de la construcción por lo que debe de prever todas las circunstancias que confluyen en el proceso constructivo antes de fijar una fecha de entrega.

Según ha informado el Despacho de Abogados Calabrús, ya son varias las sentencias que “he obtenido en este sentido que considero justa debido a que los compradores han sufrido un evidente daño patrimonial al tener que hacer frente a unas rentas por alquiler que, de haber sido entregada su vivienda en la fecha pactada, no hubieran tenido que abonar. Y ello sin contar con los problemas de pareja que conlleva esta incertidumbre en la entrega de la vivienda, pues era la primera vivienda de los clientes, la inversión de su vida, teniendo alguno de ellos que, incluso, aplazar su boda por este retraso en la entrega de su primera vivienda, etcétera”.