Botiquines Domésticos

El equipo técnico de Farmamundi en Córdoba realizó entre los años 2015 a 2017 una encuesta sobre el almacenamiento de medicamentos en los hogares cordobeses (“botiquines domésticos”). Los resultados se exponen en la tabla siguiente:

Los medicamentos más frecuentes en nuestros botiquines son los Analgésicos (Paracetamol, Metamizol, Tramadol) y los Antiinflamatorios (Ibuprofeno, Naproxeno, Dexketoprofeno, Diclofenaco), presentes en casi todos los hogares. Le siguen los Protectores gástricos (Omeprazol, Esomeprazol y Almagato) y los Preparados para la tos y el resfriado (Cloperastina, Acetilcisteina, Carbocisteína, Ambroxol), presentes en uno de cada tres hogares (33%) y los Ansiolíticos (Lorazepan, Diazepan), los Medicamentos contra enfermedades obstructivas de las vías respiratorias (Salbutamol, Montelukast) y los Antihistamínicos de uso sistémico (Cetirizina, Loratadina), presentes en el 10% de las familias cordobesas.

Los Antibióticos (Amoxicilina, Amoxicilina/Ac. Clavulánico) también están presentes en un 7- 9% de los hogares, al igual que los Vasoprotectores (Pentosano), los Antidiabéticos (Metformina), los Relajantes musculares (Tizanidina), los Agentes para terapia tiroidea (Levotiroxina) y los Agentes que reducen los lípidos séricos (Simvastatina), las Hormonas sexuales y Anticonceptivos y los Medicamentos antihipertensivos (Enalapril, Hidroclorotiazida).

A la vista de los resultados podemos concluir que, en general, los botiquines domésticos de las familias cordobesas contienen los medicamentos recomendados: antitérmicos, analgésicos y antiinflamatorios, medicamentos estacionales para la tos y resfriados y medicamentos para enfermedades crónicas como diabetes e hipertensión. La presencia de antibióticos es moderada y se ciñe a los derivados de la penicilina de amplio espectro.

Como aspectos a mejorar se aprecia la duplicidad de medicamentos del mismo grupo (y con acciones muy parecidas), sobre todo en el caso de los Antiinflamatorios y los Analgésicos y el consumo de Metamizol (“Nolotil”, prohibido en varios países europeos y en Estados Unidos) en el 33% de las familias y de Diclofenaco (prohibido en algunos países asiáticos para uso veterinario) en el 7,5% de las familias.