Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.

Las grasas “cacatrans”

.

Vanesa Cortés

0

Seguro, seguro, que esta denominación la hemos escuchado en más de una ocasión, y nos suena a que son “malas” o un poquito “perjudiciales”. Pues estamos en lo cierto: son malas, muy perjudiciales y una bazofia incluida en muchos procesados industriales.

¿Qué son las grasas Trans?

Un tipo de grasa que se obtiene transformando el aceite líquido en grasa sólida mediante un proceso denominado hidrogenación. Este proceso es realmente útil para la industria, ya que mejora el sabor, textura y perdurabilidad de los “alimentos procesados y preparados”. Por lo tanto, es un producto artificial que nuestro organismo no sintetiza, así que lo estamos castigando descaradamente cada vez que le hacemos un regalito que las contiene. Es cierto que en cierta carne de mamíferos hay grasas trans, pero su contenido no es perjudicial para el organismo.

Las grasas “cacatrans” son una bicoca para la industria del procesado,  ya que son baratas y tienen la suma ventaja de que son admitidas por las autoridades sanitarias.  La OMS recomienda reducir las grasas trans a un 1% hasta su completa eliminación de la alimentación, y sin embargo, desde que entramos en un supermercado las vemos por todas partes.

¿Con qué nombre  las podemos encontrar?  Entre sus sinónimos tenemos aceites hidrogenados, ácidos grasos trans, grasas parcialmente hidrogenadas o aceites vegetales (a saber de qué están hechos y la forma, ya que según la legislación que toque en cada país, tendrán o no obligación de hacer referencia a ellas).

Y… ¿en qué productos pueden aparecer? Pues en muchos productos que figuran en algunos hogares y que están catalogados como saludables o recomendados por algún que otro profesional como snack o desayuno “ideal”. Aparecen en: margarina, bollería industrial, galletas, patatas fritas, patatas congeladas, palomitas (especialmente las de microondas), procesados congelados (sobre todo pizzas), algunos helados, muchos productos de comida rápida, sopas y salsas preparadas, etc.

Si la margarina es una grasa parcialmente hidrogenada o hidrogenada del todo, ¿qué debo hacer? Pues no utilizarla y sustituirla por mantequilla de verdad (grasa saturada) o nuestro aceite de oliva virgen extra. Si queremos hacer un bizcocho casero utilizad aceite de oliva virgen extra o mantequilla, de verdad que no hace falta darle ese premio a nuestras arterias y hacer que se pongan duras como piedras.

Este tipo de “grasas cacatrans” presentan un gran riesgo para la salud ya que aumentan el riesgo de sufrir depresión, elevan el colesterol malo (o LDL) y bajan el bueno (HDL), elevan los triglicéridos, aumentan el peso y el riesgo de sufrir diabetes, son altamente inflamatorias, provocan enfermedades cardiovasculares, etc. Vamos, que te dan un numerito gratis para una tómbola de las que siempre toca algo, aunque sea una dolencia leve y silenciosa que se va acomodando y ocupando su sitio descaradamente en tu organismo, ese lugar que tienes para vivir y que hay que mimar un poco.

¿Sigues con ganas de seguir “metiendo” ese tipo de grasas en tu organismo? Yo te recomiendo que las evites y por favor, y sé que soy pesadísima: ¡NO SE LAS DEN A LOS NIÑOS! El otro día vi a un niño salir de un supermercado con una bebida energética en una mano y un paquete de Donuts en la otra, de forma que a ese crío le dieron para merendar: azúcar, cafeína y grasas trans. ¿De verdad es necesario hacerle tanto daño?

 Y NO, ni para consumo ocasional ni para NUNCA.

“Aquellos que piensan que no tienen tiempo para comer sano, tarde o temprano tendrán que tener tiempo para la enfermedad”. Edward Stanley

Etiquetas
stats