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¿Un SCM en ciernes?

Carlos Puentes

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Por cuestiones de actualidad meteorológica, parece adecuado comentar la especial situación que sufrirá mañana prácticamente todo el territorio andaluz. Las intensas precipitaciones que caen hoy sobre Córdoba son consecuencia del aislamiento de una bolsa de aire frío en altura (normalmente se observan a 500 hPa de presión, unos 5.500 metros de altitud) que desde ayer se viene formando sobre las aguas del Cabo de San Vicente, dicho fenómeno,  se conoce técnicamente como DANA o Depresión Aislada en Niveles Altos. Este aislamiento, en contraste con las temperaturas tan elevadas que alcanza en estas fechas nuestro litoral, provoca la formación de densos núcleos de precipitación con características tormentosas. En el caso que nos ocupa, además, se ve fortalecido en su aporte de humedad por la tormenta tropical Nadine, que en última instancia antes de su deriva por Azores, ha “alimentado” la depresión que nos afecta por el efecto atractor del movimiento isobárico asociado a la misma.

De cara a mañana, los principales modelos numéricos coinciden en la peligrosidad de la situación tan explosiva, llegando a ver lo que se conoce como un Sistema Convectivo de Mesoescala o SCM, que viene a ser un sistema tormentoso de varios núcleos asociados con un área de precipitación común del orden de 100 Km o más. El mapa de precipitaciones que HIRLAM pronostica para la tarde de mañana habla por sí sólo, un núcleo potencialmente activo que “golpearía” en el litoral granadino, donde a priori se registrarían los mayores acumulados y las rachas más intensas de precipitación.

No obstante, dicho sistema convectivo acabaría disgregándose en dos núcleos que afectarían al interior de Andalucía occidental y oriental, pero con afección sobre prácticamente todo el interior andaluz. En el caso de Córdoba parece que los mayores registros se producirán, posiblemente, en las últimas horas de la tarde. La Agencia Estatal de Meteorología nos mete nivel amarillo por acumulados en 24 horas de hasta 60 litros por metro cuadrado, y ya veremos si no nos lo ascienden a naranja e incluso cae algún nivel de aviso rojo por alguna otra zona de las provincias de Málaga y Granada. Cabe destacar además las rachas de viento en superficie asociadas al paso del centro de la depresión por el Valle del Guadalquivir, que si bien serán de carácter moderado, provocarán la convergencia de vientos en torno a nuestra área, una situación muy similar a la que provocó el episodio de lluvias convectivas el 18 de mayo de 2011 en Cañete de las Torres, muy similar igualmente a la que aconteció en Aguilar de la Frontera el 16 de agosto de 2010. Dichos episodios, tan dependientes de la microescala e impredecibles por el efecto del comportamiento orográfico, no deberían repetirse al no existir un elevado contraste entre la temperatura en superficie y la de la masa de aire en altura, pero que convendría tener en mente a la hora de analizar lo que mañana pudiera ocurrir.

Lo que sí parece probable, como ya he dicho, es la entrada de una banda de precipitación de gran intensidad, de carácter convectivo, que podría dejar unos interesantes acumulados a lo largo de todo el Valle del Guadalquivir, con especial incidencia en el litoral y pre-litoral malagueño y granadino. No obstante aún quedan 24 horas, y con una situación tan difícil de modelizar, muchas cosas podrían cambiar a la hora de localizar los puntos de mayor afección. Ante todo mucha prudencia y el consejo de tener al menos un plan B en caso de realizar algún tipo de acto público en la calle. Una situación interesantísima de las que crean afición, y cuya evolución promete dar una buena tarde para los que nos gusta hacer seguimientos de fenómenos meteorológicos severos.

Addendum

Vista la disparidad que presentan los principales modelos meteorológicos a menos de 20 horas para localizar correctamente el centro de acción, se hace necesario actualizar esta información con las principales novedades, que pasan por desviar ligeramente dicho centro hacia el levante español. Si bien dicho desplazamiento podría dejar la situación de precipitaciones en Córdoba en mera anécdota, sí que cabe estar atento a lo absolutamente excepcional del fenómeno en algunas zonas de la mitad sureste peninsular, donde se podría recoger fácilmente los 100 litros en cuatro horas. Como ya he dicho, hora de dejar el pronóstico y pasar al seguimiento puro y duro.

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