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Adesal y Anaitasuna firman las tablas y todo se decidirá en la jornada final

Lance del duelo del Adesal ante el Anaitasuna

Cristian López

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Locura en la fase de campeonas de la División de Honor Plata femenina. Había dos caminos posibles para que todo se decidiera este mismo sábado, aunque ninguno de ellos se ha obrado. La segunda jornada comenzó bien para los intereses del Adesal, ya que el Mislata, su adversario del viernes, superó al Lanzarote en el primer choque de la tarde, por lo que daba esperanzas al conjunto fuensantino de hacerse con el campeonato en caso de superar en su compromiso al Helvetia Anaitasuna, el otro gran favorito a la corona y al billete final para la fase de ascenso a la Liga Iberdrola. Pero la igualdad y la emoción son tan grandes que el destino ha querido que todo se vaya a decidir el domingo, en otra apasionante jornada que todo apunta a que será de infarto.

El conjunto de Rafa Moreno, aupado por un recinto califa hasta los topes, quería con todas su ganas el triunfo, aunque quizá ese empeño le pasó factura a nivel de gestión durante los primeros minutos, que fueron de dominio para el equipo pamplonica. Aunque con apenas un gol de diferencia, pero las navarras se mantenían en todo momento por delante, lideradas por Sofía Ballada y Marta Jaques. Eso sí, un empujón final del equipo local en la recta final del primer acto permitió que el marcador se volteara, y la ventaja al descanso era para el Adesal (11-10).

La segunda mitad continuó por el mismo sendero de igualdad, aunque ahora con las fuensantinas llevando la voz protagonista. Lucía Vacas, de largo la más determinante del cuadro cordobés, insistía en ataque y mantenía a las suyas por delante, incluso, con rentas de hasta dos tantos. Sin embargo, el Anaitasuna no dio el partido por perdido y empujó hasta el final. Con apenas un gol de diferencia se llegó a los últimos segundos, y ahí, las de Navarra encontraron el empate al filo del pitido final. Por tanto, un 25-25 que celebraron como una victoria. Lo veían perdido y rescataron esperanzas en el último instante.

Y es que todo se decidirá en la jornada final. Las cuentas son claras. Si gana Anaitasuna y pierde el Adesal, suben las navarras. Si gana el Adesal y pierde Anaitasuna, el título es para las cordobesas. Y si hay triunfo de ambas, habría que mirar la diferencia de goles general, que en estos momentos favorece a las de Moreno por apenas un tanto. Incluso, de ganar Mislata, este tendría opciones de llevarse el primer puesto en caso de un tropiezo de las califas. Todo abierto y mucho por decidir en un desenlace frenético.

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