Menos contagios pero más letalidad en Córdoba por el Covid-19

La contradicción estadística, y por supuesto emocional, marca este sábado. Al tiempo que la ya famosa curva ve rota su continuidad, otra más compleja se convierte en una auténtica pendiente. Es el resultado numérico de los efectos del Covid-19 en Córdoba, que vive una jornada de ambivalencia de sensaciones. Mientras se produce una clara reducción de nuevos casos respecto del día anterior -y el precedente-, alcanza la cifra de tres fallecimientos -que tienen lugar de golpe según los partes oficiales-. Por tanto, la provincia registra menos contagios en esta ocasión, 18 por los 24 del viernes, pero asiste a un exponencial crecimiento -oficial, es necesario insistir- en letalidad. La tasa en este último apartado es del 2,1%, sólo cinco décimas por debajo de la andaluza.

¿Por qué se da esta circunstancia? Es sencillo: la letalidad es una medida porcentual surgida del dato de decesos dividido entre el total de pacientes. Así, si existe aumento, por muy mínimo que sea, en el primer aspecto y disminución de confirmaciones en el segundo, la cuenta varía negativamente -por incremento- en cuanto a la dureza de la enfermedad. Tal hecho estrictamente matemático es el que explica que precisamente Córdoba asista a un sábado de novedades contrapuestas. De entrada, registra un total de 18 nuevos contagios respecto del día anterior, que es de seis, y del precedente (el pasado jueves), esta vez de cinco. Como continuación, tres son las defunciones desde el viernes según los partes oficiales -es una en realidad-.

Apunte por apunte, Córdoba alcanza este sábado los 143 enfermos con Covid-19. Es el guarismo resultante de la referida confirmación de 18 contagios en las últimas horas según los informes gubernamentales -Ministerio de Sanidad y Junta de Andalucía-. La suma de casos en esta ocasión es de un 14,4%, el segundo aumento más bajo de la comunidad esta vez. Sólo Huelva, con un nuevo paciente -pasa de 36 a 37- y un 2,8%, y Málaga, con un 14,2%, mejoran el dato. La provincia que capitaliza la Costa del Sol, sin embargo, registra otros 60 afectados en relación al anterior informe. Aquí entran en juego los números sin más: no es lo mismo ascender de 103 a 126, como hace Cádiz, que de 424 a 484.

Lo cierto es que Córdoba frena en cierto modo su tendencia ascendente, que continúa de manera lineal en realidad. El jueves acumuló 24 nuevos casos y el viernes, 23. Por tanto, es la primera bajada después de dos días. Pero son cinco los que encadena ya con diez o más contagios confirmados desde que el pasado martes (17 de marzo) se registrara el peor repunte hasta la fecha desde el primer positivo. Entonces se produjo un incremento de 27 afectados para pasar de 41 a 68. De vuelta al dato más reciente, la acumulación de pacientes esta vez es de sólo un 7,9% del global diario andaluz, con 228 este sábado. Además, las personas que padecen la enfermedad son menos en el total autonómico: cae al 9,4% tras llegar al 10% una jornada antes.

Sin embargo, las anotaciones dentro del análisis sabatino son mucho más negativas en otro plano. Éste es el de las defunciones después de contabilizar las tres primeras. En este sentido resulta necesario realizar una matización. Los partes oficiales llevan a un incremento de cero a tres, si bien la situación es ligeramente distintas: el aumento es desde dos de manera certera. El viernes tuvieron lugar los dos primeros decesos con coronavirus en Córdoba, los cuales no aparecieron en los informes del Gobierno y de la Junta de Andalucía -por mera cuestión horaria-. El hecho es que la letalidad en la provincia es ya del 2,1%: es decir, dos de cada cien personas afectadas fallecen. Lo grave en este apartado es el repunte vivido en relación a Andalucía, con una tasa de mortalidad de un 2,6%. El viernes, para mantener el análisis en base a los números de carácter gubernamental, la comunidad escaló hasta un 2,4% mientras el guarismo a nivel cordobés era de cero. Los fallecimientos en conteo provincial suponen un 7,5% del total regional.