Alfonso Cabello rompe barreras

Lo ha hecho todo en su especialidad. Triple medallista paralímpico de ciclismo en pista, campeón y récord del mundo... Ahora aborda un desafío nuevo. Empieza desde cero en el ciclismo convencional. Será el primer ciclista de la historia que lo haga en España. En las instalaciones del Consejo Superior de Deportes, arropado por leyendas del ciclismo español como Carlos Sastre y Óscar Pereiro, Alfonso Cabello ha anunciado su nuevo proyecto. Competirá el próximo mes de otoño en el Campeonato de España de Ciclismo, en lo que supone un paso que quedará como referencia en la integración de los deportistas con discapacidad. El cordobés, nacido en 1993 en la localidad de La Rambla, participa en competiciones paralímpicas en la modalidad C5 debido a que nació con una amputación del brazo izquierdo a la altura del codo.

“Es un reto muy importante. Soy muy competitivo. Quería afrontar una competición de ciclismo normalizado. Mi vida se basa en superar retos.Las barreras que me hacen recapacitar”, ha explicado ante los periodistas el ciclista cordobés. “Las barreras son mentales y con un poquito más de esfuerzo todo se consigue”, añadió.

“Los obstáculos los ponemos las personas con nuestra cabeza. Me encanta ver su ilusión y sus ganas por conseguir este reto. Pone a cada persona en su lugar y las diferencias del pasado se las ha cargado de un plumazo”, dijo Sastre. “Cuando vemos casos como Alfonso te das cuenta de que nos preocupamos por tonterías. Conozco a otros ciclistas con discapacidad. A veces empiezas a tratarlos con lástima y acaban consiguiendo que les admires. Alfonso no es un deportista discapacitado”, añadía Óscar Pereiro.

Cabello es el hombre que más rápido recorre un kilómetro sobre bicicleta en pista. Oro olímpico en 2012, campeón mundial (2014, 2015 y 2016) y poseedor del récord del mundo de la especialidad (1:01.683, logrado en la localidad mexicana de Aguascalientes), consiguió en los Juegos Paralímpicos de Río de Janeiro una doble medalla de bronce. Ese palmarés le convierte, a sus 24 años, en el mejor ciclista paralímpico español de todos los tiempos.

La idea de integrarse en las competiciones convencionales le lleva rondando la cabeza desde hace tiempo. En las vísperas de su partida hacia Brasil para los Paralímpicos, en julio del año pasado, relataba sus intenciones en una entrevista en Cordópolis. Lo veía claro.“Sí, sí. Puedo hacerlo. De hecho, en las concentraciones de la selección somos todos ciclistas olímpicos, no hay distinción con los paralímpicos. Hay un grupo de trabajo conjunto. Por rendimiento y por marcas puedo competir perfectamente contra ellos. Ahora, está claro que alguien que tenga una mano y alguien que tenga dos… Yo por mi esfuerzo y mi tesón estoy en igualdad de marcas, aunque no de condiciones. Si no compito en el Campeonato de España de Ciclismo sin discapacidad no es porque no me vez capaz, sino porque por las fechas del calendario es incompatible. No ha habido ningún año en el que haya podido cuadrar los picos de forma de tal manera que pudiera disputar un campeonato sin que me perjudicase en el otro. Pero lo tengo en mis planes. En cuanto pueda compaginarlo lo haré”, explicaba. Ya lo tiene fijado en su calendario.

En otros países se han producido casos de deportistas que han dado al salto de categorías para discapacitados a la competición convencional. En España sería la primera vez. “Estoy decidido a llevarlo a cabo”, dice El Cohete de La Rambla. En la sede del CSD, y al lado de nombres míticos del ciclismo español, Cabello ha expuesto sus extraordinarios planes con la naturalidad de siempre.

Desde que terminaron los Juegos de Río, en septiembre del año pasado, Cabello no ha participado en ninguna competición de carácter oficial. No acudió al Mundial, que fue convocado de manera precipitada en Los Ángeles (EEUU) el pasado mes de marzo, y después padeció una lesión -rotura del ligamento acromioclavicular de su hombro derecho- de la que se encuentra totalmente restablecido. Su reaparición será el próximo 28 de mayo en el Campeonato de España de carretera para discapacitados en Alhaurín de la Torre (Málaga), una cita que tomará como parte de su preparación para el reto posterior. El que marcará un antes y un después en el deporte español.