Las clínicas iDental ya acumulan más de 1.427 denuncias en seis comunidades autónomas

Las clínicas iDental acumulaban en noviembre 1.427 denuncias en seis comunidades autónomas, entre ellas, Andalucía. En Córdoba hay más de medio centenar de afectados que protestan por las malas prácticas sanitarias y financieras de la firma de bajo coste.

La mayoría de las denuncias se quejan de facturaciones incorrectas, incumplimientos de las condiciones de contratación, disconformidad con los tratamientos, demoras injustificadas, no devolución de las cantidades cobradas sin haberse realizado el servicio e incumplimientos del derecho de desestimiento de los clientes.

Todo ello se desprende de la respuesta parlamentaria ofrecida por el Gobierno al diputado socialista por Córdoba Antonio Hurtado. En esta provincia se supera el medio centenar de afectados. Decenas de ellos se concentraron en octubre frente a la clínica iDental, en el polígono de La Torrecilla. Muchos tenían tratamientos a medio hacer o padecían las secuelas de intervenciones realizadas con materiales de baja calidad.

En general, se trataba de tratamientos no cubiertos por la Seguridad Social, que en la atención privada suponían miles de euros de gastos pero que, con las atractivas ofertas de esta compañía, se veían sensiblemente reducidos. Pero el ahorro económico, finalmente, se ha tornado en pesadilla para muchos de ellos. Algunas de sus historias se recogen en el grupo de Facebook que ellos mismos han puesto en marcha.

El Consejo Andaluz de Dentistas, que ya lo ha puesto en conocimiento de la Consejería de Salud de la Junta de Andalucía en varias ocasiones como responsable última, exige que la compañía actúe teniendo en cuenta criterios médicos y no siguiendo el modelo de negocio actual, basado en una publicidad agresiva y, en la mayoría de los casos, posiblemente engañosa, que lleva al paciente a la confusión.

Asimismo, el Consejo Andaluz solicita que la compañía deje de usar el término “asistencia dental social” para referirse a una empresa privada que lo que persigue es captar el mayor número de clientes posible para aumentar su cuenta de ingresos. En un principio, a través de unas supuestas subvenciones para más tarde convertirlas en unas supuestas ayudas.