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Vecinos de La Palomera vuelven a reclamar que el camino y la fuente sean públicos

Marcha de protesta de los vecinos a La Palomera.

Manuel J. Albert

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Alrededor de 200 vecinos del barrio de El Naranjo volvieron a salir este domingo en defensa del carácter público del camino y la fuente de La Palomera. La asociación que lleva este mismo nombre volvió a recorrer el camino por el que llevan pleiteando durante años en los tribunales. La congregación de Los Maristas afirma que ese camino en concreto no es el histórico de La Palomera y que, por tanto, es privado y suyo propio. Así, el camino formaría parte del ámbito del Plan Especial del Castillo de Maimón.

Luis Moreno, vocal de la asociación, avanza que los vecinos estudian emprender medidas legales contra la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir por lo que consideran inacción ante la apertura de un pozo cerca de la Fuente de la Palomera y que, según denuncian, se está secando por su culpa.

Los vecinos defienden que el camino de La Palomera está registrado en el censo municipal de vías públicas desde 1884 con el número 41. La congregación religiosa presentó en 2016 una demanda en la que reclamaba la propiedad de la vía que conduce al Castillo de Maimón, del que también tienen las escrituras. Los religiosos afirman que que hay un error en la catalogación del camino público de La Palomera y que no es el que se ha marcado, que da acceso a su propiedad, sino otro que se ubica en la parte posterior.

Las discrepancias de los Maristas acabaron con una demanda de los religiosos contra el técnico de la GMU que había señalado la ubicación del camino en su finca. Aquella querella acabó desestimándose, tanto en primera instancia como en segunda. Los jueces concluyeron que el funcionario había cumplido con su trabajo y velado por los intereses de la ciudad. Pero los religiosos abrieron una tercera vía y presentaron un nuevo pleito en los tribunales que va a estudiarse dentro de tres días.

Por último, los vecinos del barrio de El Naranjo han vuelto a denunciar los cortes intermitentes de la Fuente de La Palomera. Cortes que llegaron a durar dos semanas seguidas este verano. “Para nosotros es una clara muestra de que a medida que sacan agua del pozo que construyeron los Maristas, se va secando la fuente”, resume Luis Moreno.

Los vecinos llevan años asociando la sequía de la Fuente de la Palomera a la construcción de un pozo privado la durante la primavera de 2016 en la finca del Castillo de Maimón. Aseguran que fueron testigos de las obras de construcción del pozo privado y de cómo a partir del mes de abril de ese año, de la fuente ya no manaba agua regularmente por sus dos caños.

Esta construcción hidráulica data del siglo XVIII y se trata de una fuente con alcubilla, de planta rectangular, muros de mampostería y cubierta de ladrillos. En sus paredes interiores aparecen conservadas varias leyendas que dan fe de su construcción, que terminó en 1722. El agua, que manaba naturalmente desde el interior de la construcción hacia los dos caños que la conducían al exterior, terminaba su cauce en el arroyo de La Palomera y, posteriormente, en el arroyo Pedroche.

Para recuperar el normal fluir del agua, los vecinos llevan un año demandando la clausura del pozo y no descartan acudir a los tribunales si la Confederación Hidrográfica del Guadalquivir no atiende sus peticiones.

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